marzo 6, 2025 by Daniela Raffo

Con los libros vamos formando nuestra identidad

Por Laura Flores

Alby Tejada es administradora de empresas, de profesión, pero bibliotecaria de alma. Hace unos 10 años, cuando internet no se había popularizado en el centro escolar donde trabaja ella podía indicar certeramente el número de página del libro en el que se encontraba la información que alguien buscaba.

Alby o “seño Alby”, como la llaman los niños desde hace 20, se rodea de libros y niñez. De niñez y de libros en el Centro Escolar Miguel Elías Guillén, de Nueva Concepción, Chalatenango.

Alby sabía cómo y dónde encontrar un tema, pero con el tiempo pasó a imaginar otros escenarios posibles. ConTextos instaló una biblioteca en 2015 -que Alby cuida y protege- y ahora promueve recitales de poesía, celebra el Día del Libro, organiza festivales de talentos, hace lecturas en voz alta y siempre está ideando cientos de cosas que cuenta con una enorme sonrisa en el rostro. 

Alby implementó la hora del cuento leyéndole a estudiantes. También creó docentes lectores, saca libros de la biblioteca y se los lleva a docentes que cuidan zona, es decir que durante los recreos se distribuyen en diferentes puntos de la escuela para cuidar que niños y niñas estén disfrutando de manera segura. “Eso servía como modelo para que los niños vieran a sus maestros leyendo en los recreos”, cuenta. 

Alby estudió tercer ciclo en la escuela en la que ahora trabaja. Era una estudiante muy aplicada y con una concentración que llegaba más fácil si se subía a un árbol. De adolescente no recuerda haber leído muchos libros de historias, más bien alcanzó a hojear libros de ortografía y matemáticas, pero ahora sus favoritos son los cuentos infantiles y los cuentos cortos. 

“Cleopatra es un libro que me gustó mucho, porque son historias de mujeres que han sobresalido, que han tenido que enfrentar muchas cosas para salir adelante, y se les ha creado una imagen que no ha sido tan real”, dice. 

Alby observa a sus estudiantes y los motiva.

“Algunos niños hace años estaban aquí en sexto grado, cuando vine. Tenían bastante acercamiento conmigo y me dicen “gracias porque usted me enseñó mucho” y yo digo “¿qué le enseñé?”, pero era porque ellos llegaban a la biblioteca, leían y yo los escuchaba”. 

Para ella, la lectura le abre mundos a la niñez, les libra de la soledad, les despierta preguntas, les forma una opinión. “Con los libros vamos formando nuestra identidad, nuestro carácter, nuestros gustos se van dando a conocer dependiendo de lo que leemos”, dice Alby.

Y esa creencia le hace moverse, innovar y preocuparse por mantener los libros fuera de los cajones y más cerca de las manos.

Este 8 de marzo celebramos a las mujeres que transforman historias; mujeres de la red de ConTextos responsables de bibliotecas, mujeres que invitan a leer, que escuchan, que dialogan, que forman. Mujeres de Morazán, de Chalatenango, de Ahuachapán, de Santa Ana.
Mujeres que nos inspiran.